La producción de billetes de 2$ es bastante escasa: sólo un 1% de todos los billetes que se fabrican en Estados Unidos corresponden a la denominación de dos dólares.
La práctica ausencia del billete de 2$ de la circulación ha originado un desconocimiento general de su existencia y ha suscitado incluso toda una serie de mitos urbanos y creencias populares a su alrededor.